En la práctica del running, el pie es un elemento clave, ya que debe soportar cargas elevadas y está expuesto a cambios en la superficie. Por este motivo, es importante entender los factores que nos pueden ayudar cuando salimos a correr para evitar futuras lesiones y, al mismo tiempo, mejorar el rendimiento deportivo.
A continuación, presentamos, a modo de guía, consejos para cuidar los pies durante la carrera, aunque muchos de ellos pueden aplicarse en diferentes modalidades deportivas.
1. La pisada del pie
¿¿Pronador o supinador? La famosa pregunta que todo runner se ha hecho en algún momento. Esta pregunta la podemos responder gracias a un estudio biomecánico de la marcha y la carrera, que incluye una batería de pruebas para valorar la funcionalidad de toda la extremidad inferior. De esta manera, podemos intentar evitar futuras lesiones como fascitis plantar, periostitis tibial, tendinitis aquilea o esguinces (torceduras de tobillo).
2. Las zapatillas
Es de vital importancia elegir unas zapatillas adecuadas para la práctica deportiva y, del mismo modo, no estrenarlas nunca en una competición. Los factores más importantes para elegirlas bien son conocer tu peso, el tipo de superficie donde corres (asfalto o trail), los kilómetros que se recorren de media y, lo más importante, que sean de la talla adecuada teniendo en cuenta que durante la práctica deportiva el pie siempre aumenta un poco su tamaño.
3. Los calcetines
Su función principal es permitir una buena evacuación del sudor y evitar la aparición de ampollas por fricción. En el mercado existe una gran diversidad de materiales según el tipo de pie y los kilómetros que se corran. Así encontramos materiales tan diversos como:
- Algodón: no es recomendable, ya que absorbe el sudor y provoca la aparición de ampollas.
- Poliéster, poliamida: presentan una buena transpiración, se adaptan muy bien al pie y expulsan el sudor. La parte negativa es que aumentan la sensación de calor.
- Polipropileno: es resistente, ligero, transpirable y se adapta bien al pie. Es un material muy adecuado para corredores de largas distancias.
Como puedes ver, tan importante es una buena zapatilla como un buen calcetín.
4. Corte ungueal
Las uñas deben cortarse de forma recta, nunca en punta redondeada, ya que puede favorecer la aparición de onicocriptosis (uña encarnada). En caso de no saber realizar un buen corte, es importante acudir al podólogo para revisar el estado de las uñas y aprender cómo cortarlas correctamente.
5. Observación del pie
Se recomienda aplicar crema hidratante específica cada día para frenar la aparición de grietas y/o pequeñas heridas, ya que son una puerta de entrada a infecciones bacterianas, víricas y fúngicas.
Después de cada entrenamiento, es importante inspeccionar el pie con atención para poder identificar la aparición de pequeñas lesiones, como ampollas, o la aparición de alguna uña negra como consecuencia del gesto deportivo y el impacto con la zapatilla.
Ante cualquier duda, recomendamos visitar a tu podólogo de confianza para realizar el examen adecuado.
